
La necesidad de sentirse totalmente libre para lograr así disfrutar del proceso
artístico y, también, el deseo de dedicarse simplemente a jugar es la fuerza que impulsa esta nueva producción de Aracaladanza. Cinco bailarinas y bailarines han trabajado junto a Enrique Cabrera, verdadera alma impulsora de Aracaladanza, para construir un trabajo basado en el juego.
Para jugar a la “gallinita ciega”. O para entrecruzar gomas y participar en un antiguo videojuego. Para saltar sobre el sofá, o descubrir cisnes buscando su lago. Para seguir a perros bailarines que escuchan gatos o llenarse la cabeza de aire. Para provocar fuegos artificiales o danzar todos juntos.
Play es una fiesta que contagia alegría, alienta la sonrisa y comparte diversión.